“No vayas fuera, vuelve a ti mismo. En el hombre interior habita la verdad”
-San Agustín-
Las cosas más importantes de la vida, empiezan en tu interior.
La felicidad es tu actitud ante la vida. Tu actitud depende de la forma en que decides como quieres vivir este día, hoy, el presente.
El amor, empieza por amarte a ti mismo. Para compartir ese amor, primero tienes que darte cuenta de que está ahí y siempre va a estar ahí, de hecho, tu corazón es una fuente inagotable de amor. Por eso el amor no tiene medida, no es posible medir algo que no sabes en donde termina. Lo único que tienes que hacer es aprender a quererte tal cual eres, aprender a amar tu cuerpo y tu mente.
La paz mental nace de tu interior. Cuando aprendes a amarte y aceptarte tal como eres, dejas a un lado el principal conflicto que hay en tu vida, el conflicto contigo mismo.
Hoy puedes decidir y aceptar que eres la persona más importante del mundo para ti y que en este momento eres la mejor persona que puedes ser. Lo más importante, es que siempre puedes mejorar.
Siempre podemos elegir. Podemos elegir no hacer nada y quejarnos; podemos elegir disfrutar de la vida y estar felices la mayor parte del tiempo; hasta no elegir, es una elección.
Si hoy estas aquí, lo primero que hay que hacer, es dar gracias por esta nueva oportunidad de hacer algo, de decir lo que queremos y lo que necesitamos, de compartir este espacio con otras personas, de aportar algo, de ser importantes el día de hoy.
Recuerda:
Sin ti no puedes vivir.
Sin tu cuerpo y sin tu mente, no puedes hacer nada, no puedes sentir nada, no puedes aprender nada.
Donde quiera que estés, al menos estarás contigo mismo.
1 comentario:
Gracias por decirmelo
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